Estamos todos caminando hacia un cambio muy grande. Entender este proceso ayuda a comprender el próximo paso que individualmente y colectivamente estamos dando.
En el universo no existe un centro. Toda la materia se distribuye a lo largo del tiempo y del espacio en estructuras espirales que se repiten en distintos tamaños desde lo más grande hasta lo más pequeño. Estructuras fractales.
El sistema socio económico de nuestra civilización actual es centralizado y esto hace que haya una muy mala distribución de los recursos.
Una visión futura coherente de una humanidad que vive en consonancia con las leyes del universo implica un nuevo modelo descentralizado, una nueva sociedad donde existen muchos núcleos redistribuidos por el planeta en forma homogénea y donde no haya rupturas entre los centros urbanos y la naturaleza.
Al crearse en los años 80 la internet, se dio un gran paso pues esta es la primera estructura no centralizada creada por el hombre.
Un segundo paso ha sido la creación de la Blockchain, sistema que permitirá en un futuro administrar toda la economía mundial de una forma descentralizada.
Y el tercer paso hacia el cual nos estamos dirigiendo es crear pequeñas aglomeraciones rurales en equilibrio con el entorno donde las personas se unen por la voluntad de compartir y cooperar más que por el impulso de competir y luchar.
Serán núcleos donde los convivientes no se unen por ideologías ni por intereses económicos sino, por frecuencia, por vibración o sintonia.